Conforme van creciendo los niños, su discernimiento personal irá mejorando hasta lograr que cada uno actúe correctamente por voluntad y decisión propia sin recibir órdenes de los padres y educadores.
La clave está en que, en el caso de la Obediencia, una persona de cualquier edad comprenda la importancia de obedecer a la persona con autoridad en todo, media vez no vaya en contra de la justicia. La obediencia, si se enseña desde temprana edad, se producirá por una exigencia persistente razonable de parte de los padres.
Como padres tenemos que exigir mucho en un par de cosas, pero siempre siendo claros con nuestros hijos para no confundirlos. Por ejemplo: si tenemos en casa una regla que dice que no es sano comer postres después de las 6 de la tarde, entonces no cambiemos la hora a después de las 2pm o 4pm o solo durante la semana, pero no en fines de semana. Eso es confuso. Y al establecer una regla, recordemos dejar espacio para alguna excepción. En el caso antes mencionado sería, si se puede comer postres después de las 6pm durante una fiesta o fecha especial.
La sinceridad es otro valor que recomiendo transmitir desde temprana edad, ya que ayudará a que nuestros hijos sean congruentes de pensamiento, palabra y acción. Si tienen pensamientos sinceros aprenderán a expresarlos sinceramente, siempre y cuando se les enseñe a medir la intensidad con que lo expresan. La sinceridad va muy ligada al pudor, un valor que se debe adoptar ya para la adolescencia. Si enseñamos a nuestros hijos a ser sinceros, estaremos abriendo paso a una clara comunicación con ellos más adelante en las siguientes etapas de crecimiento.
También recomiendo el valor del orden, ya que, si no lo desarrollamos desde pequeños, más adelante será más difícil, pero no imposible. Además, el orden es necesario para abrir paso a una convivencia feliz entre los miembros de la familia, amigos, vecinos y les servirá mucho al entrar al colegio. Antes de los 7 años se puede exigir orden media vez se tome en cuenta que para los niños pequeños el concepto de orden puede ser estirar su cama en vez de hacerla completamente, juntar todos los juguetes en una esquina en vez de meter cada juguete en su caja correspondiente, mantener sus zapatos adentro del clóset, aunque no necesariamente estén ordenados por parejas y muchas veces entender que cuando ellos “limpian” algo que regaron no necesariamente lo van a dejar reluciente otra vez.
En mi siguiente publicación, compartiré TIPS para enseñar los valores de la obediencia, sinceridad y orden a nuestros hijos antes de los 7 años.
¡Saludos!
“Inculquemos VALORES en casa poquito a poco. Sin prisa, pero constantemente.”
– Irene Tobias (ARETÉ)
